Riaza Los Gayumbos desde 1990

En esta época de desencanto, confusión, promesas incumplidas y falta de horizontes, educarnos en los valores es lo único que nos puede acercar al verdadero estado de bienestar y felicidad. La amistad, por ejemplo, es uno de esos valores que hacen vivir al hombre en toda su plenitud. La amistad es una de las formas más nobles que vinculan al hombre con los seres de su entorno. La amistad ha de manifestarse de forma veraz, sincera, franca. Hay que relacionarse de modo paciente, comportarse de manera cordial, tratar a los amigos con respeto, ser comprensivo con los otros. La amistad verdadera no está sometida al tiempo ni al espacio. Vivir la amistad de modo auténtico nos perfecciona éticamente. La amistad, bien entendida, constituye en la vida del hombre una meta, un fin. Debemos cultivarla por lo que tiene de valor en sí. Estar unidos es ya un logro definitivo. Ya lo decía Quintiliano: "donde hay amigos hay riquezas. Es decir, un amigo es un tesoro".

Creo, sinceramente, que mis compañeros (a ratos adversarios) de la peña "Los Amigos del Mus de La Fonda de Riaza" estarán de acuerdo con lo dicho hasta aquí. Todos tenemos una buena amistad entre sí, o como gusta decir ahora una buena amistad transversal y/o coral aunque, como es natural, puede haber más afinidad entre unos y otros y viceversa. Por eso nos encontramos asiduamente en nuestra incomparable Plaza Mayor

riazana

, en los soportales de la amplia terraza de "La Fonda", para echar una o más partidas de Mus si el "tiempo" (la familia) lo permite. Como cada año, y van la tira, acabamos de celebrar el clásico y tradicional campeonato del verano (¿bien de interés turístico nacional e internacional? Todo se andará) en el que hemos participado 22 jugadores con una exigencia mínima de 50 partidas jugadas para puntuar y de esta manera poder aspirar al triunfo final. Alguno, ojo al dato, ha llegado a batir el récord con hasta 89 partidas disputadas a tres juegos de cuarenta tantos cada una. La repera, vamos. Como verán, una auténtica prueba de resistencia (el "Dakar" del Mus). Un maratón de Mus de 25 jornadas más o menos divertidas según le fuera a cada uno en ellas.

Como sucede entre amigos, por supuesto catedráticos de Mus todos, el buen humor siempre estuvo presente, como no podía ser de otra manera. Y es que el humor es el bálsamo indispensable que todo lo permite (un inglés definió el Mus como "un juego de locos donde sólo juegan para reírse"). La realidad es que mucho humor hay que tener para sentarte a la mesa (por mucho que sea todo un honor) con compañeros como Gonzalo y Siguero, jugadores que se caracterizan por reclamar el "VAR" continuamente. A la mesa hay que sentarse sonriendo, entre bromas y chanzas sobre uno mismo y sobre los contrarios. El Mus, en definitiva, no es un juego de jugadores, sino de gente que quiere pasarlo bien honestamente. Y todos los componentes de la "peña" somos muy buena gente. Muy majos. Sin excepciones.

Vaya desde aquí, en nombre de todos sus amigos del "Mus de La Fonda", un saludo afectuosísimo para Antonio Olivera que este verano no ha podido asistir a nuestro "pequeño mundialito". Que el Mus es un juego impredecible lo demuestra la sorpresa que supuso el segundo puesto alcanzado por Emilio, jugador constante (80 partidas), pero muy, pero que muy flojito. El que se ha "revelado" como estrella, como musolari de buen corte, y ha explotado definitivamente en esta temporada ha sido el bueno de Héctor, y parece que Álvaro, el del comercio, ha vuelto por sus fueros de nuevo con su juego frío y calculador. El que pegó el "gran petardo" (y siento contarlo), o sea, el que estuvo como Cagancho en Almagro fue el "compadre" de Héctor, Sergio Berzal, pero tiene la ventaja de ser joven y aún puede progresar (si se deja aconsejar, claro). Por lo demás, apuntar que Rafa, Justo, Sergio ("mus y malas"), Jesús, Cuenca (el que suscribe) y Alfonso cubrieron el expediente con decoro y voluntad, aunque lejos de las expectativas que de la brillantez de su juego cabía esperar. Antonio, Santiago, José Antonio, Siguero, José Luis (¡vaya temporadita!), David (The Plastic Man), Gonzalo ("lo mío no vale") y Jaime, juegan desde hace años en la "otra Liga". Antonio Serrano, el campeón de la pasada edición, y Joserra no llegaron al mínimo de partidas exigido. El vencedor de la Liga 2018 (también el más llorón) ha sido "The Good Doctor", Carlos Álvarez, quien habrá de organizar el campeonato del nuevo año que habrá de llegar (2019). Buen jugador Carlos: sobrio, serio, concentrado, muy mentalizado, táctico... ha sido un justo ganador sin duda alguna.

El fin de fiesta en el mítico restaurante "La Taurina", apenas a 40 metros de distancia de "La Fonda del PP" (que nadie se mosquee, me refiero a Pepe y "Pito") donde algunos se bebieron dos barriles de cerveza como aperitivo, fue de lo mejor. Luego, en La Taurina, la "mordida" está siempre asegurada. No falla. Las chuletillas, el cordero asado y los entrecots, fueron sublimes. Lo mismo que las ensaladas, morcillas, croquetas y unos huevos rotos al más puro estilo (sencillo) del madrileñísimo "Casa Lucio". Doña María dejó un legado que han sabido conservar sus hijos, con Mariano a la cabeza y su esposa Ana Mari en los fogones. Alberto, el hijo menor, ejerciendo de maestro-sala y siempre atento a la jugada, lo domina todo. Sorprendió muy agradablemente por su simpatía y buen hacer la nieta, Almudena (una de las hijas de Puri y Nacho) que, cuando sus estudios de Farmacia lo permiten, echa una mano. A los postres se hizo entrega del trofeo al campeón y a José Antonio se le obsequió con un jamón ¡¡"Joselito"!! por sus horas (?) dedicadas a la logística organizativa del torneo, algo que a muchos nos pareció francamente excesivo y discriminatorio (jejeje). El caso es que del jamón nunca más se supimos (lo verás, pero no lo catarás).

Finalizado el almuerzo regresamos a La Fonda para disputar el campeonato final (la Champions-2018) esta vez con parejas fijas por eliminatorias directas. Las mesas repletas de jugadores y los vasos llenos de combinados de gin&tonic invitación de la casa, de Víctor, en el nombre del padre. Se impuso la pareja Antonio Sanz-JL Cuenca que arrasó materialmente con un juego espectacular de principio a fin, y eso y todo a pesar de haber tenido que jugar una partida previa. Cuatro partidas jugadas (incluida la final) en las que sucesivamente fuimos tumbando a musistas de reconocido prestigio, tales como Sergio, Siguero, Berzal, Jesús, Alfonso, Joserra..., y así hasta llegar a la "final soñada" contra la pareja Carlos Álvarez y Ángel del Ser (casi nada al aparato). Les pasamos por encima, les barrimos materialmente. Un baño (3-1). Total: 12 juegos ganados por solamente uno perdido (algo que no se recordaba por estos lares desde hace décadas). Ya gané con Justo la "Champions" de 2017 también. Cuidadito conmigo: no pararé hasta lograr la decimotercera, como el Madrid.

El Mus, amigos, es un juego, todo un juego y nada más que un juego. Un juego noble para gentes muy, pero que muy inteligentes y dotadas de profunda penetración y estabilidad psicológica. El Mus se inventó para pasarlo bien, así que, el que descubra que no lo pasa bien jugando al Mus, haga el favor de dedicarse a otra cosa urgentemente. No es el caso de nuestra "peña", aquí todos lo pasamos muy requetebién. Nada se pierde jugando al Mus con los amigos, excepto el orgullo. Ganar es placer de dioses y perder "cabrea" un poco aunque haya que disimularlo.

Ahora

Riaza

ya está en plenas Fiestas en honor de la Virgen del Manto y Ntra. Sra. de

Hontanares

que, dicho sea de paso, son las mejores del mundo (y todo el mundo lo sabe). Los encierros matutinos de

Riaza

no tienen parangón con ningunos otros. Son los más auténticos y puros que he conocido. Pamplona es otra cosa (un disparate total), y los de Cuéllar,

Sepúlveda

o Pedraza y resto de nuestra provincia se quedan por detrás. Y ya puestos...si recordamos los del siglo pasado cuando las reses llegaban a

Riaza

desde las ganaderías de procedencia atravesando la Sierra de

Ayllón

andando, al paso o al trote, hasta lo prados del Puente Nuevo" de nuestro río Aza ...pues eso, lo dicho: a ver quien nos tose.

Sean felices y participen de nuestra Semana Grande: eventos de todo tipo para chicos y grandes; la hora del vermú y los porrones; las peñas, las distintas asociaciones, la familia y amigos. Y los Toros ("novilladón" el viernes de La Quinta y "corridón" de José Escolar el sábado). Y ya saben, si quieren echarse un Mus...