Segovianos y visitantes pudieron disfrutar de más de sesenta coches clásicos, expuestos a los pies del Acueducto antes de comenzar el IV Rally Ciudad de Segovia. / KAMARERO
Hace más de veinte años que se prohibió el tráfico rodado bajo el Acueducto, pero de vez en cuando los vehículos de cuatro ruedas vuelven a concentrarse a los pies del monumento bimilenario. Pasear ayer por el Azoguejo era como un viaje al pasado, no sólo por la cantidad de automóviles que había allí estacionados, sino por la época a la que se remontan. Y es que ya ha comenzado el IV Rally de coches clásicos Ciudad de
Segovia
, organizado por el Club Rally Segovia.
Un total de 65 inscritos —que podían haber sido más, porque solicitudes había— aparcaron ayer sus ‘joyas’ junto al Acueducto para que fueran admiradas por vecinos y visitantes antes de comenzar la carrera nocturna, en torno a las 21.00 horas. Algunos coches llamaban especialmente la atención de los presentes, como el Renault 4TL, de 1979; el Toyota Celica 2.0 GT, de 1991; o los dos Porsche 944, de 1985.
Hay que destacar, además, que el Club ha conseguido este año el récord de participación, con una amplia lista de reservas, lo que pone de manifiesto el atractivo que tiene esta prueba, que forma parte del Desafío 4 Clásicas de Regularidad para vehículos clásicos —además de
Segovia
están Entresierras Histórico, Cantabria Infinita de Regularidad y la Clásica de León—.
Según explicó el presidente del Club, José Antonio García, en la presentación de la prueba, la etapa nocturna que ya recorrieron ayer los participantes constaba de 200 kilómetros y nueve tramos especiales, más un tramo espectáculo que se desarrolló en el aeródromo de Marugán, donde los conductores mostraron su pericia conjugando habilidad y velocidad.
La segunda etapa, que tendrá lugar hoy, es de unos 450 kilómetros, aproximadamente, y recorrerá las comarcas de
Sepúlveda
y la Serrezuela. Pasando por
Riaza
, el rally se adentrará en las provincias de Guadalajara y Madrid —aquí se correrá por un tramo clásico de los rallies desde los años 60, El Atazar—. Y, tras pasar por el Puerto de Navafría, pondrá su broche de oro con otro tramo espectáculo en el conocido circuito de Karpetania.
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