Riaza Los Gayumbos desde 1990

A Pedro Moreno (Madrid, 1942) le definen como un poeta del estilismo, una definición que, por simple pudor, no le agrada a esta leyenda del diseño de vestuario. “Soy un apasionado de mi trabajo, nada más”, afirma Moreno, quien, a sus 73 años, acaba de recibir el Premio Nacional de Teatro, un galardón que valora especialmente porque, según remarca, es la primera vez que se reconoce la labor de los profesionales de la figuración. Hace más de un mes del reconocimiento y aún permanece la “ola de cariño” de la gente, que “me para incluso por la calle para felicitarme”. “Necesito un detractor, alguien que me ponga a caldo para compensar toda esta oleada de elogios”, bromea Moreno, quien confiesa que los aplausos le “apabullan”, aunque “si el público protesta, me crezco”.

Moreno, también escenógrafo y dibujante, y que, entre otros muchos reconocimientos, cuenta con dos Premios Goya —por ‘El Perro del Hortelano’, de Pilar Miró y ‘Goya en Burdeos’, de Carlos Saura— y un premio Max de las artes escénicas al mejor figurinista, presume, sobre todo, de segoviano.

Aunque nació en Madrid, pasó su infancia en

Riaza

y asegura conocer a conciencia la provincia de Segovia. Es más, remarca que

Riaza

y el nordeste de la provincia han sido siempre “fuente de inspiración” en sus trabajos. “Siempre ha tenido presente en mi obra los colores, ritmos, y músicas de las que me impregné de niño en Riaza”, afirma Moreno, que se encuentra a las puertas del estreno, mañana, de un nuevo espectáculo en el que ha participado como director de vestuario. Se trata de la zarzuela “La del Soto del Parral”, la obra, en origen del año 1927, que abre la temporada en el Teatro de la Zarzuela de Madrid.

Para Moreno la representación tiene una fuerte “carga sentimental”, no solo porque la acción transcurre en

Segovia

, a mediados del siglo XIX, sino porque fue “la primera zarzuela que ví en mi vida”, además de que “la solían cantar mis tías y la gente del pueblo [Riaza] en los días de toros en las fiestas”.

No es la primera vez que el diseñador se encarga de ‘vestir’ esta zarzuela. Ya lo hizo en 2003, con una propuesta muy atrevida, al tomar el traje popular segoviano y pasarlo por el tamiz de la estética de vanguardia rusa de autores como Kazimir Malévich. “Fue un pelotazo visual”, afirma Moreno, que recuerda cómo entonces se fletó un autobús con vecinos de

Riaza

para que asistieran al espectáculo “y les encantó”. En esta ocasión, el director ha tenido que ‘rehacer’ el vestuario, en sintonía con el gusto de la directora de escena, para ofrecer una imagen más realista.

Moreno ha diseñado vestuario para ópera, zarzuela, danza, ballet, cine y sobre todo, teatro. “Solo me falta el circo y no desisto, me encantaría ir de gira con el Circo del Sol”, afirma el diseñador, quien recalca que su trabajo consiste en conseguir lo que el director de cine o teatro quiere, porque la creatividad “es como el valor en la mili, se te supone”.

Diseñar vestuario para el cine o el teatro es muy distinto. “El cine es mucho más complicado, hay primeros planos y no se puede engañar a nadie”, sostiene Moreno. No obstante, para este diseñador, que ha trabajado con los grandes nombres de la escena española, como José Carlos Plaza, José Luis Alonso o José Tamayo, “la mejor pasarela de moda es el ballet”. “En la ópera y la zarzuela manda la música y si, por ejemplo, una cantante gruesa interpreta Salomé, el público se cree el personaje por su canto, no por su figura o vestimenta”.

Actual coordinadodel curso de diseño de la Escuela de Cinematografía y del Audiovisual de Madrid, Moreno se muestra muy crítico con “el IVA cultural” (21%). “Han desaparecido muchos puestos de trabajo de pequeñas industrias y que son irrecuperables”, lamenta el también escenógrafo, que cree que “los poderes van a cargarse la cultura, pero no lo van a conseguir, nosotros trabajamos por vocación”, asegura . “Soy un privilegiado, puedo elegir, pero tengo compañeros que reciben sueldos miserables y al final tendrán que dedicarse a otra cosa o emigrar”, subraya.