La búsqueda del excursionista desaparecido en la Sierra de
Ayllón
afronta ya su primera semana, con diferentes equipos de rescate movilizados tanto por la Junta como por la subdelegación de Gobierno y resultados infructuosos. Se busca a Carlos Martos Sánchez, madrileño de 66 años, 1,70 de altura y complexión delgada. La última vez que fue visto, el pasado domingo 3 de noviembre vestía abrigo granate, un cortavientos amarillo, camiseta y gorro de lana azul y zapatillas de senderismo. Fuentes de la subdelegación le definen como un excursionista avezado y conocedor de la zona. Aunque partió en solitario, informó a su mujer de la ruta que se disponía a tomar y su móvil estaba activado con la aplicación GPS, pese a lo cual no se ha conseguido ubicar su paradero.
Todas las líneas de investigación apuntan a que ha sufrido algún tipo de percance en la zona del Puerto de la Quesera, en la Sierra de
Ayllón
y entre los términos de
Riaza
y Majaelrayo (Guadalajara). Su vehículo apareció en Riofrío de
Riaza
, desde donde partió con destino a la Quesera y al cercano Hayedo de la Pedrosa.
Los servicios de rescate achacan a las condiciones meteorológicas adversas lo infructuoso de la búsqueda. A lo largo de los seis días transcurridos desde la desaparición toda la zona ha sido objeto de una persistente borrascasa, con neblinas, chubascos, algunos de agua-nieve, que han impedido la acción de los helicópteros y limitado su búsqueda por medios terrestres. Se trata de una zona montañosa de barrancos, muy boscosa y situada entre los 1.600 y los 1.800 metros de altitud, con temperaturas mínimas bajo cero durante la semana. Todo apunta a un fatal desenlace pese a lo cual se ha incorporado al excursionista en la base de datos de personas desaparecidas.
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