Más allá de los titulares llamativos sobre nuevos brotes, o el crecimiento del número de contagios positivos confirmados y aulas confinadas, conviene no perder de vista la evolución de la epidemia de covid19. Y es que en lo tocante a
Segovia
los datos de las dos últimas semanas indican que se ha contenido la intensificación de brotes vivida en Nava de la Asunción,
Riaza
y
Segovia
capital. En una semana la tendencia a la mejora es palpable en toda la provincia, salvo en Cuéllar, donde la tasa de nuevos contagios en la última semana sigue un perfil de dientes de sierra, con pequeñas subidas y bajadas. Suben también los casos en
Sepúlveda
, Carbonero, Navafría-La Sierra y Villacastín, si bien al ser zonas de escasa población los brotes suelen tener, también, un mejor seguimiento.
Bajan en todas las demás, hasta el punto que cuatro zonas, El Espinar, San Ildefonso, Sacramenia y Fuentesaúco están en el verde. En Segovia
capital también hay una importante caída en el ritmo de contagios, al igual que en Riaza
, comarca que ha estado en el ojo del huracán de los últimos brotes.
En las últimas 24 horas se consignan 16 nuevos contagios y ningún brote nuevo, lo que al decaer algunos vigentes deja la cifra de brotes activos en 32 (1 menos que en el parte anterior).
La preocupación sigue estando en los territorios limítrofes, con Madrid mejorando levemente, pero zonas confinadas en Valladolid y Burgos. La presión hospitalaria se mantiene baja en
Segovia
pero alta en Valladolid y Madrid. No se puede bajar la guardia.
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