Riaza Los Gayumbos desde 1990

Hay festivales que se disfrutan con una cerveza en la mano y otros que se saborean con calma, como un disco de Gram Parsons en vinilo o una buena mazorca asada. El

Huercasa Country Festival

pertenece a esa segunda estirpe y es de los más ruteros que se celebran cada verano en nuestra geografía.

Y lo celebra como merece: con un cartel de lujo, buen ambiente garantizado y una década a sus espaldas haciendo patria desde

Riaza

(

Segovia

) del mejor country y americana que puede pisar escenario español.

Del 18 al 20 de julio, el festival regresa con su fórmula infalible: música con alma, entorno rural, actividades para toda la familia y gastronomía saludable. El arranque, el jueves, viene fuerte: Son Volt, leyendas vivas del alt-country y liderados por Jay Farrar, comparten noche con el joven Myron Elkins —voz de lija y canciones que huelen a gasolinera y soledad y con un nuevo disco maravilloso que ha editado hace sólo unas semanas— y Jason Scott & The High Heat, una banda de bar con el pedal de distorsión bien calibrado.



El viernes y el sábado se reparten entre el Escenario Harvest, donde reinará el crepúsculo acústico de propuestas como Jodie Cash, Back to the Hills o The Barroom Buddies Band, y el Escenario Huercasa, que reunirá nombres como el Twanguero, Color Green o Rob Leines, rugiendo con su country sureño empapado en whisky barato y riffs cañeros. Atención especial merece el regreso de The Jayhawks, que ya estuvieron en la primera edición, y el cierre del sábado con The War and Treaty, un dúo que rebosa soul, americana, blues y góspel. Ojo, no nos olvidemos del rock and roll del tremendo Al Dual y a saber lo que estará tramando Germán Salto con su Country Thunder Revue. Seguro que no decepcionarán.

Como cada año, la Plaza Mayor se convierte en epicentro diurno con conciertos gratuitos y Country Line Dance para todos los públicos. Porque aquí no se viene solo a mirar: se viene a participar. Y si te quedas con hambre, pásate por la zona de foodtrucks o por el Espacio de degustación Huercasa, donde las mazorcas a la brasa y los productos vegetales de quinta gama hacen pareja perfecta con los vinilos del stand.

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Huercasa no es Coachella, ni falta que le hace. Aquí se viene a disfrutar sin prisa, en buena compañía, bajo el cielo limpio de

Riaza

y con el corazón abierto a las canciones que cuentan historias. Y este año, además, con el lema “10 Years of Countryside”, se celebra que llevamos ya una década bailando juntos esta tonada.

Abonos y entradas de día disponibles en www.huercasacountryfestival.es. Y para los urbanitas sin coche, hay bus desde Moncloa. A tiempo estás de unirte a la fiesta. Porque en Huercasa, el espectáculo empieza mucho antes del primer acorde.

Texto: J.F. León<8b>

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